Reciclar de modo Energético

El plástico en un material que pueden arder y servir de combustible. El plástico que ya fue usado y recolectado para luego ser seleccionado, se lleva a una incineradora para ser quemado, obteniéndose energía calorífica que puede utilizarse en los hogares o en la industria, o bien para obtener electricidad.

Veamos un ejemplo: 1 kg de polipropileno aporta en su combustión, casi tres veces más energía calorífica que 1 kg de madera de leña; 1 kg de PET aporta igual energía que 1 kg de carbón; o 1 kg de polietileno genera igual energía que 1 kg de gasóleo.

Pero siempre existe un inconveniente y en este caso es que al tratarse de un proceso de combustión, se genera CO₂ el cual es expulsado a la atmósfera y esto suma un gran problema para el efecto invernadero, así como otros compuestos gaseosos que pueden resultar tóxicos (aerosoles).

Por ello, este proceso debe ir acompañado de controles y medidas de seguridad que eviten estos efectos dañinos.

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